La
defunción de Gregorio Peces-Barba ha traído consigo toda una retahíla de
adulaciones, loas, lisonjas de los medios de manipulación de masas y personajes
apoltronados en los órganos de poder y decisión. Este buen “socialista” padre
de la actual constitución era un personaje con más oscuridad que luz. Lo de
socialista sería porque fue militante del P$OE que ya sabemos todos que de
socialista no tiene nada, lo de obrero se lo llevó a la tumba Largo Caballero
y, si acaso, lo de la E
de español pues se lo dejaremos.
Sólo
hay que ver los comentarios, aplausos y demás alabanzas que realizaron
individuos totalmente comprometidos con la clase trabajadora como el gran
ladrón Emilio Botín que entre sollozos ha proclamado “Era un gran español…” o el
principito "Siempre fue generoso en sus expresiones, siempre estaba dispuesto a
escuchar y a comentar con transparencia y con libertad cualquier asunto”
o esa brillantez intelectual que es Pérez Rubalcaba "Aprendí de Peces-Barba a no
tirar jamás la toalla" y
así podríamos continuar unos cuantos párrafos más pero creo que no vale la
pena; todos estas palabrerías huecas hablan por sí solas.
Detrás de todos los camelos que los medios de
incomunicación nos esputan; nos encontramos a un señor, íntimo amigo del
Borbón, que fue uno de los perpetradores de esta constitución realizada desde
arriba imponiendo y blindando una corona parasitaria y corrupta tal como ya
previó el dictador Franco; nos impuso un sistema económico, político y social
que no es otro que el capitalismo; un régimen electoral que favorece un
bipartidismo caciquil defensor de los intereses de los privilegiados; una
defensa del ejército como garante de la soberanía nacional entre otras normas
de difícil digestión.
Y esta es la seudodemocracia que este señor ha
defendido, dentro de un partido como es el P$OE, que no ha visto más realidad
que el capitalismo neoliberal, realizando privatizaciones y reformas laborales
antitrabajo colocándose siempre a la vera de los empresarios, favoreciendo e
impulsando los contratos temporales, explotando y humillando aún más a las
clases trabajadoras, atomizando a la población, recortando el gasto social a la
mínima expresión, implicándonos en proyectos imperialistas, serviles y bélicos
como la OTAN,
integrándonos en proyectos ultraliberales como la UE simplemente porque así lo requería la
“modernidad”…
Y este señor además de ser un amigo de los
privilegiados tenía un talante digamos fascistoide; entre las heces
intelectuales que escupió transcribo unas cuantas "Yo siempre digo en broma -dijo
Peces-Barba, en referencia a la época de Felipe IV- que qué
hubiera pasado si en lugar de quedarnos con Cataluña nos hubiéramos quedado con
Portugal, porque igual nos habría ido mejor. Aunque no, hubiera habido un
problema gordísimo, porque nos perderíamos los encuentros entre Real Madrid y
el Barcelona"; o su defensa a
ultranza del fascista, también padre de este engendro de constitución y
fallecido meses atrás Manuel Fraga “… era
un animal político puro…”.
Así
que como podemos intuir nada hay de socialista y muy mucho de ultraconservador
por llamarlo suavemente.
Y
ahora podemos entender un poco más porque llora el mafioso Botín, porque lo halaga
la familia borbónica, porque van todos los de la rosa y, lo que no entiendo,
que se le perdió al dirigente de CCOO en el funeral de este señor y es que
estos representantes del sindicalismo claudicante no aprenden nunca.
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