Se
montó un festival de poesía en Barcelona a principios de mayo. Se
colocaron poemas en distintos puntos de la ciudad de diferentes
poetas de distintos lugares. El Ayuntamiento de Barcelona fue la
precursora del asunto. Uno de los poemas en cuestión no gustó a las
fuerzas represoras ni a la delegada del Gobierno Nazional ni al
ministro fascista de interior, el aborto de Escrivà de Balaguer un
tal Fernández Díaz; la alcaldesa socialdemócrata barcelonesa
ofició de censora y al final retiró los versos de Bukowski, que
tanto molestaban a los matarifes del reino de los borbones.
El escritor norteamericano Charles
Bukowski que murió hace ya más de veinte años sigue molestando al
poder imperante y sus versos son declarados ilegales por las hordas
inhumanas que fornican estos mundos. Dejo el poema censurado en
cuestión
4 polis
“Perros
vigilan los muros mientras
el submarino se va rápidamente a pique.
Estoy
en una cafetería con 32 caras de cartón,la mayoría inexpresivas.
4
polis de aspecto impecable
están
sentados a una mesa
mirándome.
Supongo que yo
no
tengo tan buena pinta
a
sus ojos.
¿Por
qué no
enviamos
a esos muchachos a morir
en
alguna guerra?
Sus
madres no habrían llorado más de diez minutos”
Charles
Bukowski.
EL
PRESIDENTE DE LOS CAPOS EMPRESARIALES de la CEOE, un ladrón de
nombre Rosell, ha vomitado que el “trabajo fijo y seguro es un
concepto del siglo XIX”. Los currelas se tienen que acostumbrar a
trabajar por cuenta ajena de forma discontinua con salarios infames,
24 horas del día más las extras y dar gracias al Dios nuestro de
cada día, el Capital, por poder ejercer la esclavitud a cambio de
pan y casa y, eso ya se verá si la puedes pagar. Por otro lado el
gobierno nazi alemán contrata a refugiados a euro la hora trabajada
es toda una medida que la podrían implantar en el país borbónico.
La
extinción del trabajo asalariado y la socialización de los medios
de producción es la única solución para abandonar la servidumbre de la gleba
contemporánea que sufrimos. Y todas estas sanguijuelas, como el caso
de este señor, que viven del estado fascista, que exprimen la
sangre de los trabajadores se les acabaría el chollo y no tendrían
más remedio que ponerse a trabajar por el bien común, por
la comunidad.