El
partido peperro ha elegido a un nuevo presidente para su entramado
corrupto, ultraliberal y neofranquista. El elegido se hace llamar
Pablo Casado y su ideología abarca desde la derecha extrema hasta la
extrema derecha. Esta secta saqueadora de todo bien público habido y
por haber celebró una reunión donde dos seres inhumanos rebuznaban
a ver quien era más fascista y al final ganó el tal Casado que fue
elegido por la camarilla mafiosa. Este regüeldo del criminal de
guerra Aznar esputa ideas que van desde Milton Friedman pasando por
Fraga y acabando en los legionarios de Cristo. El ideario de esta
lacra es lo de siempre dar dinero a espuertas a escuelas privadas y
concertadas; las cuales deberían dejar de existir, privatizar los
servicios sociales que aún quedan por mercantilizar y ser los
capataces de los intereses del capital en general y de sus bolsillos
en particular. Y mientras andamos en trabajos esclavos con sueldos
infames que esta gentuza ha promocionado o, simplemente, en el
desempleo a tiempo completo el tal cristofascista Casado cobra su
sueldo público de diputado más un plus de mil ochocientos y pico de euros en cuestión de dietas aún teniendo casa en Madrid; cosas de los chanchullos de esta cleptocracia choriza en la que vivimos; parece ser
que también es un gran acumulador de masters como su compi
Cifuentes; todos adquiridos sin asistir a clase ni realizar exámenes
ni trabajos de fin de estudios; todo muy diáfano y cristalino.
No
es que haya diferencia entre las políticas económicas ultraliberales que
promueven estos con los pesoes o con los nacionalistas periféricos;
sólo en el pote de pintura hallarás una diferencia de color pero no
de fondo; la principal distinción de la masa infecta de las
gaviotas es que siempre encontrarás su lado de cara al sol y donde todo
lo que no sea estar con ellos y tener su visión de la España ultramontana es estar
con ETA.