El Lince Rojo

EL LINCE SOLITARIO RECORRE SU HÁBITAT LIBRE COMO EL VIENTO SIN OBEDIENCIAS, SERVIDUMBRES NI ADULACIONES.

martes, 30 de enero de 2018

En estos días

En estos días puigdemoníacos donde ese éter del independentismo neoliberal catalán no siente la necesidad de ir a una segura prisión preventiva a cambio de la presidencia de su gran amada Cataluña. La misma que bien valía un expolio fiscal, unos millones de comisiones, unos buenos recortes sociales y unas millonarias subvenciones para sus amiguetes. Desde el gobierno central comandado por una nulidad mental, otro siervo del capital y la x de varias x de ese entramado mafioso que es el pp; que ha tenido un hijo naranja ciudadanesco que le da de comer para que le sustituya como administrador eficiente de los poderosos; se sigue buscando por tierra, mar y aire al refugiado en Bruselas.
¿Y el capitalismo? Viento en popa a toda vela
¿Y las capas trabajadoras? Naufragando en la precariedad y con sus derechos masacrados
¿Y Pujol I de Cataluña y todo el pesebre mafioso que montó? Libres como el viento.
Veremos como se sigue desarrollando el espectáculo porque la cosa va para largo o no.
EL BORBÓN F.VI cumple 50 años y todos los medios de incomunicación del régimen se ponen manos a la obra para agasajar, masajear, lamer, babear y mentir a la opinión pública sobre las bondades del “preparao”, lo buen padre de familia que es y la vida sencilla y burguesa que lleva este hombre rodeado de lujo, palacetes, comilonas y demás . Todo costeado a costa de sus súbditos, ciudadanos, plebe. Y como somos tan originales no sólo mantenemos a un parásito borbón y familia sino que tenemos el lujazo de tener en nómina dos reyes y dos reinas ¿qué más queremos?.
Ahora el okupa borbónico le dará un collarón a su hija mayor para que le suceda en el trono en un tiempo futuro. Esperemos que las mentes despierten y que el borbón y sucesores se reúnan con sus parientes franceses más temprano que tarde que es donde deberían estar.
Reyes por designio y voluntad franquista, que no sirven para nada más que para perpetuar el robo al pueblo; con unos medios de incomunicación al servicio de la glorificación de semejante aberración institucional obsoleta; mientras tanto seguimos sin dar sepultura y reconocimiento a los más de cien mil desaparecidos republicanos que siguen enterrados en las cunetas. Un país que se acostó franquista y se levantó demócrata. Un país que sufrió un golpe de estado contra la II República y vivió una sangrante guerra civil y exterminio de la población trabajadora por parte de las oligarquías fascistas. Un país que seguirá postrado y humillado si no vuelve a la legitimidad que le fue robada hace ya ocho décadas.

jueves, 18 de enero de 2018

¡Viva el Mal Viva el Contrato Social!

Dice un ser que vive del erario público desde que tiene uso de la sin razón; una tal Celia Villalobos, que muchos jubilados llevan más tiempo cobrando la pensión que trabajando; que los trabajadores tendrían que hacerse un plan de pensiones privado. La verdad es que no sorprende; que va a decir un aborto de la partitocracia, una trepa de partido mafioso para poder pasarse su santa vida de parlamento en parlamento cobrando un pastizal al mes sirviendo al poder. Esta vergüenza de fémina, ladilla con carné de ese entramado criminal que son los peperos rebuznó lo que tenía que rebuznar. Esta señora que cobra más de 8000 euros al mes por echarse cabezadas en el congreso o jugar con el ordenador portátil mientras hace que hace algo y no hace nada pero cobra de todos. Toda esta escoria que se ha dedicado a saquear el país, a robarnos la cartera, a privatizar hasta el aire que respiramos nos insultan en nuestra cara con la más abyecta impunidad.
La gran mayoría de personas jubiladas no llega a los 1000 euros al mes; muchos son los que cobran 300 y otros ni eso. Y este parásito que retoza en el pesebre que hay aquí montado; miente, roba y se jacta de todo ello. Y como decían en aquel programa para niños de hace ya decenios ¡Viva el Mal Viva el Capital! Y en eso estamos.


miércoles, 3 de enero de 2018

2018 ¿Más de lo mismo?

El 2018 amaneció como oscureció el finiquitado y letal 2017. Un año que ha traído más precariedad laboral, esclavitud para muchos y la nada que llevarse a fin de mes para otros. El gobierno del partido corrupto y criminal del Estado anunciando que salimos de la crisis gracias a la recuperación económica, es decir, a la buena salud macroeconómica y a la mala salud y enfermedad crónica para el conjunto de la sociedad currante. Comunismo invertido triunfante. Los beneficios se reparten entre los poderosos y los demás a pagar y a ser esquilmados como obedientes ovejitas. Más de trece millones de españoles que mirarán su hambre, su oscuridad, su angustia con un grito sordo de silencio por culpa de las políticas ultraliberales del gobierno de esta nación y de sus taifas siempre al servicio de sus amos los capitalistas. Los bienes públicos mercantilizados para la euforia colectiva del empresariado corrupto en connivencia con los poderes impúdicos y políticos de este país.
Y aquí en tierras catalanas seguirá la matraca independentista; el odio de muchos contra el odio de otros tantos; las subvenciones identitarias de tantos contra el silencio de otros; seguirá el negocio del procés que da muchos dividendos y muchos salarios a tantos patriotas; una república capitalista virtual y de cartón piedra del que unos pocos viven mientras otro millón largo de catalanes malvive en la exclusión social. Un parlamento con las dos fuerzas ganadoras de la derecha neoliberal. Pero ¿acaso existe la izquierda en éste o en cualquier otro parlamento?.
Los humanos deberíamos proteger a los colectivos más pobres, viejos y débiles de la sociedad para evitar que caigan en las garras de los depredadores sin poder hacer frente al pago de sus hipotecas o a los recibos de electricidad que calientan sus hogares en invierno. A los que apenas sobreviven con sueldos tercermundistas en una sociedad con precios del primer mundo. A los sin trabajo, a los que recogen comida en los bancos solidarios de alimentos, a los que caen en la indigencia y duermen en la calle. A los refugiados políticos que huyen de la represión y de las guerras que azotan sus países, a los emigrantes que buscan un futuro mejor para ellos y sus familias y mueren ahogados en las playas del mismo mar Mediterráneo donde nos bañamos en vacaciones. La solidaridad, ya sea entre clases sociales, entre comunidades o entre países, está languideciendo. Se ha perdido el glamour de ser solidario. Solo hace falta fijarse en la distribución de la renta en nuestra sociedad, dominada por un capitalismo cada vez más liberal y por nacionalismos excluyentes. La radicalidad nos hace más débiles, como país, como sociedad y como personas. Somos testigos de una guerra entre banderas, esteladas contra nacionales, pero ninguna roja. La bandera roja aportaba años atrás valores de solidaridad, internacionalismo proletario, reivindicaciones sociales, honestidad. Esos valores se han diluido y han sido arrasados, sustituidos por “los otros nos roban”, “somos más inteligentes que ellos”, “nosotros somos demócratas, ellos son fascistas”, como si la inteligencia o el ser demócrata pudieran repartirse per cápita entre millones de personas de un mismo bloque por igual. Las espadas siguen en alto, la lucha continúa y así la sociedad no puede progresar. Aprendamos algo de los lobos.”
Luis Campo Vidal.